Elección de equipo (conclusión)

La elección del equipo para nuestro estudio de grabación será una mezcla entre nuestras preferencias
personales de trabajo y las “exigencias de la industria”. Cuando el presupuesto para construir el estudio es grande, podremos optar por adquirir equipo que a día de hoy sea un estándar en la industria y así poder captar cualquier posible cliente. Pero, cuando ocurre lo contrario, deberemos ser especialmente cuidadosos con el equipo que elegimos, ya que sabiendo que no seremos capaces de cumplir con todos los estándares.

Intentaremos tener un equipo de grabación lo más extenso posible que ofrezca una buena calidad y suplir estas carencias con nuestra experiencia para que el cliente quede contento, quiera repetir y recomiende a otras bandas o artistas nuestro estudio.

Si lo anterior sale bien, en un futuro podremos ir adquiriendo mejor equipamiento, seguir mejorando nuestras instalaciones y obtener cierta rentabilidad. Empezar un proyecto de estudio desde cero con el fin de obtener beneficios a corto plazo no suele ser viable, así que lo más sensato es invertir en el proyecto mirando a largo plazo y no cerrarse a estilos concretos, ya que eso limitará el número de posibles clientes, quizá en un futuro sí podamos especializarnos en estilos concretos, si las cosas han ido como esperábamos.

Además de ofrecer un servicio de grabación, también deberíamos poder ofrecer servicios de Mezcla y Master, aunque éste último requiere de una fuerte inversión extra. El cliente debería poder salir de nuestro estudio con su producto acabado o, por lo menos, con la grabación y la mezcla ya finalizadas.

También, se debería contemplar la idea de alquilar el estudio sin ingeniero de sonido para que los clientes que lo contraten puedan traer al suyo propio para que sea él quien se encargue de hacer el trabajo. Es por este motivo, que adquirir equipo estándar va a facilitar la adaptación del ingeniero al estudio. Si tenemos experiencia como músicos tocando en grupos o produciendo para otros podemos usar nuestra cartera de contactos para invitar a otras bandas y artistas a que graben en el estudio a un precio bajo o simbólico, con la idea de que más adelante quieran grabar con nosotros o alquilar las instalaciones. Y, por supuesto, habrá que emprender una campaña de publicidad por internet y redes sociales para darnos a conocer. De todas formas, si quieres abrir un estudio y dedicarte profesionalmente a la industria de la música, te recomiendo mucho que te mires nuestro curso de Music Business online.